Las expectativas sobre una millennial

Qué se espera de una Millennial esposa, mamá, profesionista, cristiana y ¡Hasta Influencer...! Soy Millennial y estoy muriendo en el intento 


Antes de empezar este texto, me gustaría aclarar que millennials somos todos aquellos nacidos en los 80's - 90's a quienes nos toco vivir nuestra adolescencia en pleno cambio de Milenio y aunque no somos nativos digitales, vivimos la revolución de los medios de comunicación y la tecnología.

Llegó el 2020 y con ello los 30's, que típico de esta edad aún nos sentimos chavos pero con mayores posibilidades, mientras que de niños veíamos viejos a los del tercer piso y hoy creemos que estamos en la plena juventud.

A veces pienso que se espera mucho de nosotros, y se nos ha etiquetado como rebeldes, quejosos, individualistas, etc, sin embargo considero que nuestra propia generación ha puesto expectativas muy altas, cada vez más influenciadas por la popularidad de las redes sociales y la posibilidad de mostrar al mundo los logros en diversas áreas.

Y es ahí cuando llego a mi particularidad, pasando ya un poco la crisis de la pandemia, llega un 2021 donde veo que tantas mujeres "rompérsela" allá afuera como profesionistas y en su vida social principalmente, siendo influencers de moda, salud, arte, y ya dentro de un círculo más cercano, como cristianas católicas, esposas y mamás.

Es entonces cuando me vienen a la mente tantas veces que he escuchado, ¿qué es de Rox? , me la imaginaba viajando por el mundo, trabajando en el extranjero, participando en una ONG, etc. Y por otro lado quienes me ven como católica, esposa y mamá participando de eventos, formación, cursos, mi comunidad, equilibrando una vida como esposa, mamá y profesionista, y viendo mi testimonio día a día.

Me encuentro en un punto en el que estoy revaluando mi vida, mis expectativas, mis prioridades, por un lado sigo siendo esa pequeña llena de sueños y anhelos, que busca ser apapachada por mamá y por otro me miró como un adulto con responsabilidades, metas y objetivos por los cuales trabajar. 

Siempre me he considerado alguien especial y una consentida de Dios, es por ello que hoy elevó mi oración por encontrar ese equilibrio, por tener como prioridad mi felicidad y la de mi familia, por no perderme a mi misma entre las responsabilidades y las expectativas que asumo el mundo tiene de mi, por seguir trabajando para alcanzar mis sueños, pero sobre todo por mantener a Dios en primer lugar en mi vida. 

Gracias por leerme ❤️

Comentarios

Entradas populares de este blog

CAFE: Catequesis Familiar ¡En Línea!

No estás sólo

Jesús, yo confio en ti